El Certificado de Sello Digital (CSD) es un documento electrónico necesario para que los contribuyentes puedan emitir facturar. Es un instrumento electrónico que el SAT proporciona a todos los contribuyentes una vez que se dan de alta.

Actualmente, el SAT  puede cancelar al contribuyente su sello digital por tres supuestos.

1. Si no logra localizar al contribuyente en su domicilio fiscal o si durante el procedimiento administrativo de ejecución éste desaparezca.
2. Si el SAT tiene conocimiento de que el causante sea partícipe de delitos como contrabando, defraudación fiscal, o bien, que encubra algún delito fiscal.
3. Si en un mismo ejercicio fiscal, no presenta tres o más declaraciones periódicas consecutivas o seis no consecutivas.

Estas medidas se endurecen y complementan este 2020 en la  Miscelánea Fiscal.

• Si están dentro de la lista negra de empresas fantasma y no hayan desvirtuado las operaciones.
• Si el ingreso declarado y el impuesto retenido por el contribuyente no concuerden con los señalados en los comprobantes, expedientes, documentos o bases de datos que tenga el SAT.
• Si se detecta que el domicilio fiscal señalado por el contribuyente no cumple con los supuesto de ley.
• Si los medios de contacto establecidos por el SAT registrados para el uso del Buzón Tributario, no son correctos o auténticos.
• Si se realizan una o más de las conductas infractoras previstas en los artículos 79, 81 y 83 del CFF.
• Otra razón es que el fisco detecte que el causante no desvirtuó la presunción de transmitir indebidamente pérdidas fiscales.

¿Qué hago si el SAT cancela mi sello?

Tendrás que presentar una aclaración en el portal del SAT para desvirtuar y mostrar pruebas para corregir su situación dentro de los primeros 10 días posteriores a la notificación de cancelación.

¿En qué me afecta el que cancelen mi sello?

Se afectan las actividades económicas/empresariales normales porque lo que sucede es que, al no tener el certificado, no se puede facturar, por lo que una empresa puede quedar paralizada.